miércoles, 18 de diciembre de 2013

Reunión de padres

Una vez entregados los trabajos y aprobada la lista de participantes por la Jefatura de estudios os comunico que después de las vacaciones de Navidad tendrá lugar la reunión de padres para presentar la experiencia.

lunes, 18 de noviembre de 2013

Primera etapa: Sarria - Portomarín

SARRIA - PORTOMARÍN (21.6 Kms.) Día 1 Comienza nuestra peregrinación propiamente dicha; nuestra mochila llena sobre todo de ilusión... después de un largo viaje en el que hemos recorrido la península de Sur a Norte y haber cruzado el Mare Nostrum... Nuestra primera noche en un albergue, las primeras llamadas de atención para dejar los móviles y dejar descansar... aún no somos conscientes de que hay que estar descansados para nuestra primera jornada... Después de desayunar, un poco antes de las 8 de la mañana nos sacaremos a la salida de Sarria en el primer cruceiro de nuestro camino la foto de grupo... Ya es una tradición que año tras año hemos ido cumpliendo y a la voz de "Buen Camino" empezamos a andar... A la salida se desciende suavemente por las últimas calles de la villa hasta cruzar la vía del tren y a continuación el Camino se sumerge en un bosque de hayas, robles, pinos y toda suerte de arbustos que hacen las delicias del caminante. Este agradable paseo, finaliza en una carretera poco antes de llegar a Barbadelo, por la que se continúa hasta el siguiente núcleo de población: Rente. Seis kilómetros y medio separan Rente de Brea, siempre hacia el oeste utilizando toda clase de caminos y atajos que se entrecruzan. Algunos tramos están asfaltados, otros, como las típicas "corredoiras", se salvan saltando de piedra en piedra para evitar las corrientes de agua, como ocurre entre Peruscallo y Cotiñas, dos de las muchas diminutas aldeas y caseríos que se encuentran en casi toda la ruta gallega. Nada más cruzar Brea se encuentra el mojón del kilómetro 100 y justo después de un aislado caserío aparece una pequeña capilla de piedra, donde los peregrinos suelen dejar avisos y mensajes. Se suele parar a reponer fuerzas ... pero los descansos no deben ser muy largos... los decansos largos rompen el ritmo y luego nos cuesta mucho más continuar... La salida de Ferreiros es un descenso por el asfalto, en cuyo final se encuentra su modesta iglesia y cementerio. (Serán muchos los que veamos por el camino). Por carretera alternando con atajos y corredoiras se continúa hacia Vilachá, antes pasaremos por fincas ganaderas o mini aldeas, sin ninguna clase de servicios como: Rozas, Mercadoiro y Parrocha, entre otras. En muchas de ellas aún pueden verse los típicos hórreos, de planta rectangular y paredes de madera que sirve para resguardar el maíz de las humedades y de los roedores. Vilachá, que se encuentra a unos dos kilómetros de Portomarín, es una aldea algo mayor que las anteriores, pero que también carece de todo servicio. Nada más cruzarla y después de caminar un rato po
r terreno despejado, se inicia un fuerte descenso que nos lleva al embalse de Belesar. Aquí empezaremos a darnos cuenta de que a veces los descensos son más duros que las cuestas. La moderna población de Portomarín, ya que la antigua descansa bajo las aguas del pantano, se alcanza tras cruzar el río Miño por un sólido puente y ascender por una larga escalinata. Ha terminado la primera etapa... Por la tarde intentar visitar la Iglesia ... fijaros como todas las piedras están numeradas, eso es por que cuando se construyó el nuevo pueblo la Iglesia fue trasladada piedra a piedra desde su antigua ubicación a la nueva...

Segunda etapa: Portomarín - Palas de Rei

PORTOMARÍN - PALAS DE REI (24.5 Kms.) Día 2 A la salida de Portomarín y después de cruzar la carretera, se atraviesa un ramal del embalse por un puente (la pasarela hace unos años que está cortada por motivos de seguridad) y acto seguido se asciende por la ladera de dicho vado, que se halla bien poblada de pinos. A unos dos kilómetros, el Camino sigue el curso de la carretera hasta alcanzar la población de Gonzar. Son casi 9 km. de subida constante que empiezan a hacer mella en el peregrino y que si el tiempo no acompaña puede ser mucho más duro aún. Después de Gonzar comenzamos con un pequeño ascenso, luego se gira a la izquierda y muy cerca nos encontramos con el siguiente núcleo de población: Castromayor, en cuya entrada y a la derecha se puede apreciar un centenario eucalipto. Saliendo de la aldea hay una cuesta bastante dura que parece interminable y que te permite ver la distancia que se ha ido formando entre los diferentes grupos, después saldremos nuevamente a la carretera que nos conduce a Hospital de la Cruz. La salida de Hospital está enfrente del albergue y resulta un tanto confusa. Primero hay que cruzar la carretera de Orense, después subir a la derecha por el carril de incorporación y finalmente torcer a la izquierda para tomar la carreterita que conduce a Ventas de Narón. Hay que fijarse en las indicacaciones ... la autovía se cruza por un puente que la atraviesa. La carretera que tomamos a continuación es comarcal y corremos el riesgo de caminar por el medio de la misma... ¡Precaución! Hay coches circulando !!! Del mismo modo se llega a Ligonde y Eireche, poblaciones muy cercanas entre sí. Antes de llegar a Eireche. Es necesario caminar otros 5 largos kilómetros por esta ondulada tierra, para alcanzar Avenostre, y desde ahí acometer el último tramo por los caminos, una vez superando el pequeño alto del Rosario, descenderemos s hacia el final de la etapa: Palas de Rei.

Tercera etapa: Palas de Rei - Arzúa

PALAS DE REI - ARZÚA (28.7 km.) Día 3 Se inicia la caminata por el asfalto hacia el valle del río Pambre y tras haber recorrido dos largos kilómetros, se toma un desvío a la izquierda, que por los caseríos de San Xulian y Pontecampañas, nos lleva hasta la primera aldea de Casanova. Esta primera parte del camino es muy llevadera. Media hora más tarde y después de cruzar el río Porto, se entra en la última provincia del Camino: La Coruña Un pedazo de calzada, con restos de la Roma antigua, nos conduce hasta Leboreiro, y 6 kilómetros de agradable paseo por caminos y corredoiras nos separan de Melide, antes pasaremos por la trastienda de un polígono industrial y por la vega de Furelos, donde un puente de 4 ojos nos recordará la vía primitiva... llegaremos relativamente temprano pero merece la pena pararse a reponer fuerza comiendo algo de pulpo a feira ... La entrada a Melide es una larga travesía por la carretera de Lugo, el refugio se encuentra en la parte más elevada de la ciudad, se pasa por delante del mismo y se sigue, en descenso, por la Rúa de San Antonio. Justo frente al bar Pilmar hay que girar a la derecha y tomar un camino que penetra en un tupido bosque. Tras cruzarlo, se llega al caserío de Parabispo y enseguida la aldea de Boente. A partir de Boente se inicia un descenso hacia el río del mismo nombre y se intensifica lo que ya es una constante en las onduladas tierras de Galicia, un sinfín de toboganes que rompen las piernas del caminante. Es sin duda, una de las dos partes más duras del camino por la larga distancia que hay que recorrer y porque el cansancio se va acumulando ... Antes de entrar en Arzúa (la meta de esta jornada, se pasa, en este constante subir y bajar, por los valles de los ríos Ribedeira e Iso y también por las pequeñas Aldeas de Castañeda y Ribadiso da Baixo, localidades todas ellas muy cercanas entre s
í. La entrada a Arzúa va precedida por una cuesta de dos km. bastante agotadora... aunque ya nos queden pocos metros para llegar al albergue la pregunta de "¿cuánto queda?" no deja de repetirse... Una vez en Arzúa... Probad su queso... un buen bocata del mismo hará que completemos nuestra experiencia gastronómica gallega del día...

Cuarta etapa: Arzúa - Arca (Pedrouzo)

ARZÚA - ARCA( 19 km.) Día 4 Es una jornada de nervios, pero también de serena paz. El peregrino siente que tiene Santiago al alcance de la mano y, aunque es una etapa breve en comparación con las que hemos hecho los días anteriores, esto hace que, posiblemente, sea la que más ánimo nos dé ya que se llega relativamente pronto al albergue... (Si se siguen las indicaciones a la llegada al pueblo y no nos perdemos...) El terreno es casi una calca de la etapa anterior, la constante: son subidas y bajadas entre pequeñas aldeas y caseríos que distraen al caminante pero es muy llevadero y se hace bastante ameno. Para alcanzar Salceda, que es la primera aldea que se encuentra con algún servicio, tendremos que superar 11 km., pasando antes y en primer lugar por el caserío de Pegontuño, en cuyo punto se cruza la N-547 por un túnel bajo la misma y, posteriormente, por los de Calzada, Calle y Boavista, que también son minúsculas poblaciones sin servicios. A partir de Salceda la carretera es la referencia, ya que el Camino, serpenteando con ella, pasa por los caseríos de Ras y Brea para llegar al alto de Santa Irene y descender seguidamente a la pequeña aldea del mismo nombre. Bajando Santa Irene se llega a la carretera (aproximadamente cuando se llega al km. 19 y allí en vez de continuar el camino (que sigue por detrás del pueblo) hay que continuar por la carretera y entrar en el pueblo... El camino se retomará la madrugada siguiente. A una media hora más de camino se encuentran los núcleos de población de Rúa y Pedrouzo, donde se encuentra el refugio de Arca, llamado así por el nombre de la Parroquia que cubre esta zona, se llega a él siguiendo por el arcén de la carretera.

Quinta etapa: Arca (Pedrouso) - Santiago de Compostela

ARCA- SANTIAGO (21.5 km.) Día 5 Nuestra última etapa: Este día nos levantaremos temprano (a las cinco de la mañana)para comenzar a caminar una hora más tarde e iluminados por nuestras linternas adentrarnos en el bosque de la salida del pueblo para poder llegar a tiempo a nuestro destino; Santiago y asistir a la "Misa del Peregrino" ... Pistas y caminos entre frondosos bosques de eucaliptos, pasando por las aldeas de Cimadevilla y San Paio, nos llevan a Labacolla, de cuya población toma el nombre el Aeropuerto de Santiago, que se encuentra muy próximo, como así lo atestigua el trepidar de los aviones. Seis kilómetros de ascenso, pasando por la pequeña población de San Marcos, son los que restan para llegar al Monte do Gozo. No son precisamente muy agradables, ya que buena parte del tramo hay que hacerlo por el asfalto, pero la seguridad de que muy pronto vamos a ver las agujas de la Catedral de Santiago (sí el tiempo lo permite), suple con creces las últimas penurias del peregrino. Es la etapa más gozosa de toda la ruta. Es prácticamente un tramo urbano, bien señalizado que sigue la traza histórica. La mochila no pesa, las endurecidas piernas parecen volar sobre el asfalto. Seguramente te embargue la emoción y los sentimientos estén a flor de piel, sólo tú podrás describir lo que has vivido y transmitir esta experiencia a los demás. Espero que haya merecido la pena y seas uno más de los que recuerden aquel camino que hiciste cuando estabas en 4ºESO.

miércoles, 13 de noviembre de 2013

Caminos de Santiago

Experiencia de un peregrino

Werner van Zuylen, es un peregrino natural de Liege (Bélgica), lleva 96 días haciendo el Camino de Santiago; empezó el día 15 del pasado mes de julio en la Plaza Roja, de Moscú. Después de cruzar Rusia, ha seguido la Ruta por Bielorrusia, Polonia, República Checa y Alemania; estando en estos momentos recorriendo Francia. Van Zuylen tiene previsto llegar a Santiago de Compostela el día 24 de diciembre de 2013, después de caminar 4.420 km. Werner está escribiendo un interesante blog de viaje, en el que nos narra sus experiencias por las distintas ciudades y países que cruza en su peregrinación hacia Compostela, ilustrado con unas espléndidas fotografías del Camino por tierras del norte de Europa. Blog: http://mosaco.eu/

martes, 29 de octubre de 2013

PRIMERA EXPERIENCIA

En Mayo de 2006 un grupo de 8 alumnos y 2 profesores del IES Siete Colinas de Ceuta realizaron la experiencia de las últimas etapas del Camino de Santiago... Han pasado ya 7 años y medio y han sido más de 100 alumnos y 10 profesores los que han tenido la oportunidad de realizarla durante 8 cursos académicos... Este año puedes ser tú uno de los que entren a formar parte de esta gran familia de peregrinos que recuerdan con ilusión esa semana en la que pudieron ver que el Camino empieza y termina en uno mismo... Ojalá puedas vivir y recordar con mucha alegría esos días...